VERDAD Y BONDAD, LA NEUTRALIDAD HACE LA DIFERENCIA
Al final todo podría ser verdadero y bondadoso, porque todo parte de la mejor versión y entendimiento de nuestra realidad.
Para nuestra mente, todo es como creemos que es. Y así nos sentimos y reaccionamos.
Diferenciar la realidad alineada, de la distorsión de la realidad, sólo es posible cuando hemos encontrado el equilibrio en el desequilibrio, cuando hemos encontrado la transparencia oculta, lo coherente en lo incoherente, la luz que ilumina la oscuridad, la sombra que se ve y crece gracias a la luz, las dos polaridades nacen de la misma base y avanzan hacia el mismo propósito, los dos extremos nacen de una verdad individual y de un interés personal o fraccionado, pero las consecuencias hacen la diferencia entre las partes.
Toda idea transparente o coherente se fundamenta en la responsabilidad de lo que elegimos, permitimos y asumimos. Mientras que toda idea oscura o incoherente se justifica en responsabilizar a los demás, de aquello que elegimos, permitimos, pero no reconocemos ni asumimos.
Toda idea transparente o coherente tiene el propósito de solucionar o asumir. Y toda idea oscura o incoherente tiene el propósito de juzgar o forzar.
Toda idea transparente o coherente nace de la honestidad y genera confianza.
Toda idea oscura o incoherente nace del miedo y genera culpa.
Gracias a la transparencia y a la oscuridad experimentamos la ambivalencia entre la incoherencia y la coherencia. El escenario ideal para desarrollar la maestría de elegir entre la comodidad, la pérdida y el discernimiento.
Podemos vivir cómodos en la incomodidad, perdidos en la guerra o despertar nuestra capacidad de elegir entre reflejos, espejos y realidades, entre iguales, opuestos y complementarios. Las dos polaridades (+) y (-) nos pueden acercar o alejar del centro. Los dos caminos que creamos para salir y volver al punto neutro.
La transparencia refleja e incluye la oscuridad.
La oscuridad oculta y guarda la transparencia.
En la neutralidad encontramos el sentido de cada verdad. La neutralidad hace la diferencia entre las infinitas versiones de la verdad y la bondad.